martes, 1 de julio de 2008

¿Como y porque levantarnos temprano? [Parte 1]

Nuevamente el día de ayer volví a llegar tarde a la oficina. Cada que eso sucede la situación se repite, es como si la sensacion de fracaso se hiciera presente una y otra vez, pues el día anterior perjuraste que no volverias a llegar tarde, pero sorpresa, has llegado tarde de nuevo

La verdad no puedo recordar en que punto de mi vida empecé a llegar tarde a todas partes, pero lo que si estoy seguro es que se ha convertido en una gran constante para mi. En la universidad llegaba tarde, en mis dos empleos que he tenido he llegado tarde, cuando termine la escuela y entre a hacer mi servicio social llegaba tarde, cuando he salido con mis amigos o con mi novia he llegado tarde... en fin es como un mal habito que amenazaba con nunca dejarme. Por suerte también la flexibilidad siempre ha estado presente en las personas que se han visto afectadas por mi poca o nula puntualidad, de lo contrario no hubiera terminado la universidad, no tendría empleo, me hubieran cancelado mi servicio social, mis amigos ya me hubieran dejado de hablar o mi novia ya me hubiera tronado. De verdad que es milagroso que nada de lo anterior haya pasado todavía.

Pero el día de ayer fue diferente, el no llegar temprano nuevamente me molesto y en esta ocasión no solo perjure llegar temprano, sino que en verdad me lo propuse y me comprometi a encontrar una forma para solucionar el problema.

Me puse a pensar y a investigar un poco, pues era claro que mi problema radicaba en mi gran afición por dormir de mas. Y pues... habría que arreglarlo a toda costa...